Riego Ascendientes y breves notas sobre el General liberal asturiano. Serenos alegres, Valientes, osados, Cantemos, soldados, El himno a la lid. Y a nuestros acentos El orbe se admire Y en nosotros mire Los hijos del Cid, Soldados, la Patria Nos llama a la lid, Juremos por ella Vencer o morir. Observa
Mario Gómez (ver abajo en Fuentes su obra)que en un litigio de realengos
contenido en el libro del Becerro de Corias consta que el conde Pedro
Plaiz, que gobernó Tineo en 1145, era hijo del Infante don
Pelayo, nieto del Rey don Fruela II, y vivía en Arganza. En Arganza tenían
después su solar los Plaiz de Arganza, que se decían
descendientes del Infante, llevaban su apellido y usaban sus armas. Y el
señor de esta casa, don Menen Plaiz de Arganza,
casó con la heredera de Cabo del Río, fusionándose los dos
linajes; aquí recayó por varonía la descendencia de dicho conde. Esto
último se ve en el árbol de la casa, así como que más tarde mudaron
caprichosamente este apellido, tomando varios, y últimamente el de Núñez,
de una familia con quien enlazan. Los
Riego tienen su casa solariega en Cabo del Río. Sus
armas: dos dragones o cabezas de ellos, con una barra ardiente en la boca.
Pero al pasar a ella la varonía de la ilustre casa de los Plaiz de Arganza,
usaban también su blasón que, haciendo referencia a su ascendiente el
infante Don Pelayo, se componía de la efigie del mismo, la cruz y el lema Hoc
Signo Vinces. Todos los descendientes de la casa
Riego de Cabo del Río, llevaran o no el apellido Riego, se decían
con orgullo “hijosdalgo notorios de casa y solar conocidos, armas poner
y pintar”, añadiendo: “descendientes por línea recta de varón
de las casas de Cabo del Río”. Esto ocurrió a los Riego ascendientes
del General, como una de las ramas menores que al separarse formaban un
nuevo solar tomando distinto apellido, que a veces mudaban a voluntad. El primero de ellos que usó el Riego
fue don Miguel García del Riego, que lo tomó de su abuela
doña Inés Fernández del Riego. Desde entonces siguieron
llevándolo sus descendientes, pero añadiendo el Núñez (últimamente
adoptado en Cabo del Río), para hacer así referencia a su ascendencia
allí. Causa ésta de que aún al General Riego algunos historiadores le
pongan como segundo apellido Núñez, y otros Flórez o Flórez-Valdés, que
era el de su madre. Hay
quien confunde a esta familia Riego (del general) con la tan notoria en
genealogías asturianas del señorío del Coto de Sangoñedo, rama de la
casa de Tineo, que es distinta. Apellido
Riego hubo bastante en Asturias y fuera de ella. Lo llevaron en el
concejo de Tineo hidalgos, como en el mismo Tuña los de la casa del
Barreiro, de donde salió la dicha doña Inés Fernández del Riego, y aun
gentes del estado llano. Los
Riego de Cabo del Río destacaron siempre por su cultura. El
antes citado como primero que tomó el apellido en cuestión, don
Miguel García del Riego, era Alférez mayor de Tineo; su hijo el
Capitán Don Alonso del Riego y Llano, abogado de los Reales Consejos,
Teniente General del Principado de Asturias, Gobernador interino del mismo
en 1695; de éste fue hijo don Nicolás Benito del Riego (abuelo del General
Riego), miembro del Consejo de Su Majestad, Oidor de la Real Audiencia de la
Coruña y más tarde de la de Canarias.
Los
ascendientes vía paterna del General Riego procedían de la casa solar Cabo
del Río, en Tineo, de la que los Riego eran una rama segundona que formó
nuevo solar, tomando distinto apellido que a veces mudaban. El primero de
esta rama que usó como apellido el Del Riego fue:
I.
Miguel García
del Riego, Alférez mayor de Tineo. Tomó como primero el apellido de su
abuela doña Inés Fernández del Riego. Sus descendientes añadieron el Núñez
(Del Riego Núñez) para indicar su descendencia del linaje así apellidado
de los Cabo del Río, y del que se creía que descendía del conde Pedro Plaíz,
que gobernó Tineo en 1145 y era hijo del infante don Pelayo, nieto éste
del rey Fruela II. Desde entonces, sus descendientes tomaron como primero de
sus apellidos el compuesto del Riego Núñez. Miguel fue padre
II.
Alonso del
Riego Núñez y Llano.
Abogado de los Reales Consejos; Teniente General del Principado de Asturias;
Gobernador interino del mismo en 1695. Fue padre de
III.
Nicolás
Benito del Riego Núñez,
nacido en Tuña (Tineo). Miembro del Consejo del Rey; Oidor de la Real
Audiencia de la Coruña; Oidor de la R. A.
De Canarias. Muere en Canarias en el año 1755. Casó
con Micaela Rosa Flórez-Valdés y Alonso Flórez de Miramontes; hija de los
señores de Palacio de Carballo, en Cangas de Tineo. Al fallecer el entonces
señor de Cabo del Río, Tomás Núñez-Flórez, célibe, dejó por heredera
a Micaela Rosa, que pasó a residir en la gran casa de Cabo del Río. Con
ella vivieron allí su hijo mayor, Nicolás, y su hijo menor, Eugenio. Nicolás
Benito y Micaela Rosa fueron padres de
1.
Nicolás del
Riego Núñez y Flórez-Valdés. Jefe de la casa Riego, heredó de su madre
el mayorazgo de Cabo del Río. Casó con María de Sierra Pambley, canguesa,
heredera de los palacios de Pambley y Miravalles.
2.
Ignacio del
Riego Núñez y Flórez-Valdés. Fraile carmelita. 3.
Mª Teresa
del Riego Núñez y Flórez-Valdés. Monja en el convento San Pelayo de
Oviedo. 4.
Leonor del
Riego Núñez y Flórez-Valdés. Casó con Manuel Félix García-Miranda,
regidor perpetuo del concejo, mayorazgo de la casa de la Torre de Tuña.
5.
Eugenio del
Riego Núñez y Flórez-Valdés, que sigue. 6.
Gabriela del
Riego Núñez y Flórez-Valdés 7.
Francisco del
Riego Núñez y Flórez-Valdés 8.
María del
Carmen del Riego Núñez y Flórez-Valdés
IV.
Eugenio
del Riego Núñez y Flórez Valdés,
nacido en Canarias donde su padre era Oidor de la Audiencia. Poeta
y bohemio. Colaboró en periódicos de Madrid con el seudónimo Eudelino
Egregio (anagrama de su nombre y apellido). Disfrutó de la amistad del
Conde de Campomanes. Fue vecino de Tuña, donde casó en mayo de 1774, con
26 de edad, con Teresa Flórez Valdés, de 24 años, hija de Antonio Flórez
de la Sierra e Isabel López Valdés (llamada La Camborra, por ser éste uno
de sus apellidos y el nombre de uno de sus cotos en León), ambos naturales
de Tuña. Fue Administrador de
Correos de Asturias, y al tomar este cargo pasó a vivir con su familia en
Oviedo, siendo Rafael aún niño. Vivieron en la calle de los Estancos, y
luego en la de San José. Pasaban los veranos en Tuña. Fue censor de la
junta directiva en Oviedo de la Sociedad Económica de Amigos del País.
Amigos suyos fueron Campomanes
(que había nacido de humilde familia labriega de Sorriba), Agustín Argüelles
y Alvaro Flórez Estrada. Eugenio
y Teresa fueron padres de
1.
Josefa del
Riego Flórez. Con 23 años de edad casó en Tuña, en 23-XII-1798, con
Joaquín del Riego Bustillo, de 40 años, viudo y con una hija. Primos en
tercer grado, por ser él nieto de Miguel García de Riego, citado arriba en
el apartado I. Vivieron en Tineo y allí nació el 15-5-1800 su hija María
Teresa Antonia Josefa Joaquina Eugenia, a la que llamaron –a falta de
nombres en que escoger- La Puchurra.
2.
Joaquín del
Riego Flórez. 3.
José del
Riego Flórez. 4.
Miguel del
Riego Flórez. Canónigo. Falleció en Londres en 1846. 5.
Rafael José
María Manuel Antonio del Riego Flórez, que sigue. 6.
Gabriela del
Riego Flórez. 7.
Francisco del
Riego Flórez. 8.
Mª Carmen
del Riego Flórez.
V.
Rafael José
María Manuel Antonio del Riego Flórez, Nace el día 7 de abril de 1784 en Tuña, concejo de Tineo, en la casa
llamada de la Chamborra, por ser éste uno de los apellidos de la abuela
materna de Rafael. Siendo aún niño pasó la familia a residir en Oviedo.
Vivía la familia en la calle de los Estancos, y luego en la de San José.
Veraneaban en Tuña. Rafael
del Riego proclamó la constitución del doce, La Pepa, en San Juan
de Cabezas el 1-1-1820, dando así comienzo al llamado trienio liberal, y
fue ahorcado en Madrid el 7-XI-1823. Si
Riego murió en un cadalso, No
murió por infame o traidor; Que
murió con la espada en las manos, Defendiendo
la constitución.
Seguidamente
insertamos una breve biografía del General Riego, tomada de la Enciclopedia
Encarta.
Rafael
del Riego (1785-1823), militar y político español. Nacido en Santa María
de Tuñas (Asturias), estudió en la Universidad de Oviedo y se desplazó en
1807 a Madrid, donde se integró en el Ejército como miembro de la guardia
del rey Carlos IV. Se encontraba en su región natal cuando tuvo lugar, en
1808, la sublevación contra las tropas invasoras francesas que dio origen a
la guerra de la Independencia. Con el grado de capitán, en noviembre de
1808 fue hecho prisionero, en el transcurso de la batalla de Espinosa de los
Monteros (Burgos), y deportado a Francia. Finalizada la guerra en 1814 y
restaurado por vez primera el rey Fernando VII, regresó a España y se
dedicó a difundir los principios de la francmasonería en los cuarteles.
En
1819 recibió destino como teniente coronel en un batallón del contingente
que debía embarcarse desde las costas andaluzas hacia las colonias
americanas, con el objeto de combatir los intentos de emancipación de aquéllas.
Comprometido con la causa liberal, tras participar en la conspiración
revolucionaria que pretendía la vuelta del régimen constitucional, efectuó
un pronunciamiento el 1 de enero de 1820 en Las Cabezas de San Juan
(Sevilla) y recorrió Andalucía proclamando la Constitución de 1812,
actitud con la que posibilitó el inicio del consiguiente Trienio Liberal.
Convertido en un mito popular, se le nombró capitán general de Galicia y,
más tarde, de Aragón, cargos ambos de los que resultó destituido.
Asimismo, fue elegido diputado y, en 1822, presidente de las Cortes. En 1823
combatió a las tropas enviadas por la Santa Alianza para restaurar el
absolutismo en la persona del Rey (los llamados Cien Mil Hijos de San Luis).
Fue capturado en la localidad de Arquillos (Jaén) y ejecutado en Madrid el
7 de noviembre del mismo año. El llamado Himno de Riego, creado en su
honor, llegó a ser declarado en 1931 himno oficial del Estado español
durante la II República. Fuentes: Eugenia
Astur, en su obra sobre Rafael del Riego editada en Oviedo
en 1933.
“Los
siglos de Cangas de Tineo”,
de Mario Gómez. Fuente
de la nota biográfica: Enciclopedia Encarta.
Antonio
Castejón.
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