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 TORRES ALAVESAS. La de Larrea, de los Lazarraga.

 

Texto transcrito de la gran obra, en dos tomos, sobre las Casas Torre de Alava (de cuyo autor no recuerdo ahora nombre). 

 

Torres y linajes en Zalduendo, Larrea, Larrínzar, Heredia, Eguino, Ordoñana, Vicuña y Zuazo

 

ZONAS DE INFLUJO  GUEVARES  Y  LINAJES  AFINES    AL  DE GUEVARA EN  BARRUNDIA Y EN LA LLANADA   ORIENTAL

 

Los Guevaras supieron ejercer el influjo de su bando y establecer alianzas de parentesco con las familias más poderosas de la zona, desde Barrundia hasta el boquete Oriental de la Llanada y hasta el mismo valle de Gamboa, estableciendo una cadena de linajes afines entre sus posesiones alavesas y las guipuzcoanas. . .

Los reiterados matrimonios de Guevaras. con señoras de linaje de Lazarraga, poderosa familia de Oñate, mantenían a la vez el influjo de los Guevaras sobre varias torres alavesas.

En la subida de San Adrián tenían los Lazarragas su torre fuerte de Zalduendo y en el camino a Aránzazu y Oñate por la sierra de EIgnea, la torre de Larrea, comprada en 1439 por Don Pedro Pérez de Lazarraga (ver Lazarraga, Rama de Oñate, apartado II), gobernador del estado y Casa de Guevara en el segundo tercio del siglo XV, y ayo del que después sería Conde de Oñate.

Un hijo de Don Pedro Pérez de Lazarraga y de Doña Teresa Gómez de Berganzo, camarera de Doña Constanza de Ayala nieta del Canciller y señora de Guevara, llamado Don Juan de Lazarraga, casó con Doña María Vélez de Larrínzar, señora de la torre de Larrínzar, avanzada hacia Gamboa ligada así a la parentela de Guevara.

Los Larrínzar estaban emparentados ya desde el siglo XIV con los señores de las torres y palacios de Heredia y Amézaga. Con esta última Casa se hallaban unidos los Lazarragas de Zalduendo, parientes asimismo de los señores de la torre de Ocáriz en Galarreta, con la que también se hallaba unida la torre de Oreitia por matrimonio de un hIjo del primer señor de la torre con Doña Juana López de Ocáriz de Galarreta.

A finales del siglo XV el señor de la torre de Larrea Don Gómez de Lazarraga, hijo de Don Pedro Pérez de Lazarraga y hermano de Don Juan de Lazarraga, casaba con Emilia de Zuazo y Herdoñana. La unión de Guevaras y Ordoñanas, troncos de los Vicuñas, señores de la torre de Vicuña, se hallaba consagrada ya desde antiguo, con el matrimonio de una hija de Don Ladrón de Guevara con Don Fernando de Herdoñana.

La relación de los Guevaras con los señores de la torre de Larrea, los unía también a la torre de Zuazo de Gamboa por los Berganzos, mediante el matrimonio celebrado a fines del siglo XV entre Martín Gómez de Berganzo, camarero del primer Conde de Oñate, con Doña María Martínez de Zuazo, heredera de la torre de Zuazo; y cerrando aún más el ciclo de matrimonios entre familias afines, en el siglo XVI casaba Don Pedro Martínez de Zuazo, señor de la torre de Zuazo, con Doña María Pérez de Lazarraga, descendiente de la de Zalduendo.

Emparentaron también los Guevaras con otras casas hidalgas de la Llanada. Una hija del primer señor de Oreitia casaba en Ascarza con Don Juan Vélez de Ascarza, otra con Juan Vélez de Guevara de Zurbano y otra, salida también de la torre de Oreitia, hija de su tercer señor, con Miguel Ruiz de Audícana.

Mediante estos parentescos, las torres de Amézaga   en  Eguino,   Lecea,  Vicuña,  Zalduendo, Larrea, Galarreta, Heredia,Laminzar y Zuazo formaban una cadena que protegía a los Guebara en sus fronteras con Araba.

Larrea.

SITUACIÓN

Se encuentra Larrea en el valle de Barrundia, paso de Zalduendo a Ozaeta, con dos accesos a Guipúzcoa hacia Oñate y Aránzazu, llamados "Camino viejo de Larrea a Oñate" y "Camino a Aránzazu y Oñate" respectivamente, por los puertos Occidentales de la sierra de Urquilla.

Defendiendo estos pasos se situó en Larrea la Casa de Lazarraga, procedente de Oñate y afín a la de Guevara. Los Guevaras, señores y después condes de Oñate, contaron con linajes adictos afincados en los caminos principales, entre la Llanada Alavesa y riberas del Zadorra, donde se asentaba su casa fuerte y su castillo de Guevara, y las tierras guipuzcoanas de Oñate. Uno de estos linajes, el de Lazarraga, se insertó en las comarcas limítrofes con Guipúzcoa; y la torre de Lazarraga en Larrea fue un hito mas en esta tendencia y en esta política.

 

LA  TORRE  DE  LAZARRAGA

Aunque la encontramos perfectamente documentada, pocos recuerdan hoy en Larrea a los Lazarragas, con su torre, su palacio de "Quitapechos", y su capilla de San Pedro, patronato de la torre en la parroquia del pueblo.

Recorriendo la aldea hallamos, no obstante, en sus afueras, al Norte del núcleo de la población,  al lado del camino de Oñate y junto a un regato que desciende desde la sierra, un edificio con las proporciones y los elementos característicos de las torres medievales;   por carecer de documentación y de huella  heráldica,  no  podemos   identificarla plenamente con la torre de los Lazarragas, aunque indudablemente se trata de la misma.

Me refiero al caserío llamado "El Bolo", edificación con dos partes bien diferenciadas: un palacio de ladrillo, con estructura y disposición constructiva análoga al "opus spicatum", entramado de madera, solana y porche con columnas de piedra y, hacia el Levante, un cuerpo de 12,80 por 6,90 metros de planta, con elementos medievales muy característicos en las torres alavesas. Al parecer, la torre medía sólo 8,90 metros del lado Este por los 6,90 de fachada Norte, ya que 3,90 metros del costado de Levante, con la cara correspondiente a la fachada, se añadieron en fecha posterior.

El muro Este de la torre, mira hacia el río que aquí se curva formando un foso natural defensivo de la casa fuerte. En ésta se abrían dos ventanales con arco conopial de proporciones reducidas, ya que ninguno llega al metro en su altura y apenas al medio en su luz;  van los arcos en uní soló sillar que se apea en piedras bien labradas. En la fachada trasera se aprecia un amplio vano de un metro aproximado de altura y poco menos de ancho con arco muy rebajado y dos puntas en su parte alta; este arco mixtilíneo, acaso el dintel de un ventanal doble que ha perdido su mainel, va labrado en un sillar amplio, aunque de poca altura. Todos estos elementos nos permiten fechar la primitiva torre en el siglo XV avanzado, aunque el palacio anejo pertenezca al XVI ya en sus finales, o acaso en los comienzos del XVII.

 

Los Lazarragas y su origen

LOS   SEÑORES   DE   LA   TORRE

La casa torre de Lazarraga en Larrea fue uno de los solares adictos a la parcialidad gamboína en Álava a partir de la primera mitad del siglo XV.

Procedentes de Oñate, habían actuado en esta villa los Lazarragas como cabezas del bando gamboíno de las "águilas" o "aquilos", contra los Ullívarris o "cervunos",destacado linaje oñacino; y como gamboínos fueron asimismo fieles siempre a los Guevaras señores de la villa y parientes mayores de Gamboa. La heráldica recoge estas luchas representando al águila de Lazarraga y Garibay, ambos linajes gamboínos, atacando a un ciervo, símbolo del bando oñacino representado por los Ullívarris.

Según viejas tradiciones, a mediados del siglo XIV era señor de la casa de Lazarraga en Oñate Don Juan Ibáñez de Lazarraga, de quien la tradición decía haber hallado un tesoro con el que enriqueció su casa. Este fue padre de Don Pedro López de Lazarraga el Viejo, casado con Doña María Pérez de Ugartondo. El hijo de éstos DON PEDRO PÉREZ DE LAZARRAGA estrechó la ya antigua vinculación con la Casa de los Guevaras, poco después Condes de Oñate.

Por entonces los Guevaras se afincaban cada vez con mayor fuerza en Guipúzcoa. Además del señorío de Oñate, tenían desde 1374 el valle de Léniz por privilegio de Enrique II confirmado por sus sucesores. Por ello los Lazarragas, puntales del poder gamboíno y guevarés en tierras guipuzcoanas, se situaron en Álava ya en 1439, comprando Don Pedro Pérez de Lazarraga la torre de Larrea, en un punto clave en las comunicaciones de Guevara a Oñate a través de las sierras de Elguea y Urquilla, y en el mismo camino viejo de Larrea a Aránzazu.

Según tradiciones con muy pocos visos de posibilidad, aunque recogidas por Don Juan Pérez de Lazarraga el Cronista de la Casa (1), la torre de Larrea había sido fundada en el siglo IX por Iñigo Arista y otorgada a su servidor Iñigo de la Torre en 871 con sus propiedades, coto redondo, aguas, casas, viviendas, ermitas e iglesias "en el valle montuoso de la entrada de Alaba" y con el privilegio de asilo dentro "de cien brazadas del contorno de la torre" (2). Como puede verse, esta tradición legendaria apunta a un hecho real: el apoyo de los reyes de Navarra en sus orígenes a las principales estirpes gam-boínas para su asentamiento en los límites alaveses.

Dice el mismo documento que, andando el tiempo, la torre de Larrea fue propiedad de los herederos de Don Juan Beltrán de Murguía y Doña Fernanda Beltrán de Loyola su mujer, y de los de Galar López de Aspe y Doña Elvira Viras su esposa, que la vendieron a un clérigo, Pedro Yáñez de Guevara, Abad de Oñate, que la poseyó algunos años. Este Don Pedro Yáñez tenía en arriendo algunas rentas temporales y espirituales de la Casa de Guevara. Aprovechando esta circunstancia iba a entrar en escena, en relación con la torre de Larrea, Don Pedro Pérez de Lazarraga, ayo y curador del señor de Guevara Don Pedro Vélez de Guevara y alcalde mayor y gobernador de los estados de Guevara por Doña Constanza de Ayala, nieta del Canciller Don Pedro y madre de Don Pedro Vélez de Guevara, y por sus hijos, llamados el mayor como su padre, y el segundo Don Iñigo Vélez. Don Pedro Pérez de Lazarraga, había casado en el palacio de Doña Constanza de Ayala con Doña Teresa Gómez de Berganzo, emparentada con los Sarmientos y pariente también de Doña Constanza, hija ésta de Don Fernán Pérez de Ayala y Doña María de Sarmiento ; al quedar huérfana de padre (3), Doña Teresa Gómez de Berganzo pasó a vivir al palacio de Doña Constanza, señora de Guevara, y allí casó con el mayordomo de esta casa y gobernador de sus estados Don Pedro Pérez de Lazarraga, según hemos visto. Este Don Pedro, buscando un rodeo, por la ojeriza que el linaje gamboíno tenía a la torre da Larrea, que había pasado a manos del bando contrario, llegaría a hacerse dueño y señor de la torre y sus propiedades. Hizo Don Pedro que el recaudador encargado de cobrar las rentas de los Guevaras no las pidiese al abad Pedro Yáñez de Guevara, rentas que el mismo Pedro Pérez de Lazarraga pagaba puntualmente. Cuando calculó que el abad no tenía posibilidad de abonar lo que debía, puso Lazarraga el asunto en conocimiento de Doña Constanza y de su hijo Don Pedro Vélez; y así apremiado, el abad hubo de vender la torre y los bienes de Larrea a los señores de Guevara quienes a su vez los vendieron a Pedro Pérez de Lazarraga, que recibió los derechos y escrituras de la torre de Larrea y fue a vivir a ella con su mujer Doña Teresa Gómez de Berganzo, fortificándola y reedificándola. Los restos de la torre estudiados al comienzo de este capítulo y conservados hoy son por tanto del segundo tercio del siglo XV, toda vez que la compra se realizó en 1439 y Don Pedro y Doña Teresa testaron en 1466 (4).

 

Los Lazarragtu en la torre de Larrea

Don Pedro Pérez de Lazarraga, su nuevo señor, además de reedificar y fortificar la torre que acababa de comprar, reconstruyó y reforzó otro palacio frontero a ella, llamado Quitapechos o Eche-Nagusia y fundó una capellanía, bajo la advocación de San Pedro, en la parroquia de San Millán de Larrea. No se conserva resto alguno de ella en el templo románico de Larrea, situado en el costado Norte de la parroquia actual, obra erigida en el siglo XVI, y posterior por tanto a la fundación de Don Pedro.

Don Pedro Pérez de Lazarraga y Doña Teresa de Berganzo fueron padres de Doña María Pérez de Lazarraga, casada en Zalduendo con Don Rodrigo Ochoa de Amézaga ; de don Juan Pérez de Lazarraga, casado a la torre de Larrínzar con Doña María Vélez de Larrínzar; de Don Pedro López de Lazarraga, que casó en Oñate con Doña María de Araoz, y fueron padres de Don Juan López de Lazarraga, contador mayor de la Orden de Santiago, teniente de la fortaleza de Alegría de Álava, escribano mayor del Corregimiento de Vizcaya, secretario, consejero y contador mayor de los Reyes Católicos y de su hija Doña Juana, y albacea testamentario de la reina Doña Isabel, nieto por tanto de los señores de la torre de Larrea; de Don Gómez Pérez de Lazarraga, que heredó la torre de Larrea, y de Don Iñigo de Lazarraga, clérigo en San Miguel de Oñate. Estos cinco hijos de los señores de la torre de Larrea nacieron en el palacio de Guevara, sirviendo sus padres a Doña Constanza de Ayala en el gobierno de sus estados y como ayos de sus hijos. Los dos siguientes nacieran en la torre de Larrea, después de haberse asentado en ella en 1439: en la torre de Larrea vieron la luz, en efecto, el sexto hijo de Don Pedro y Doña Teresa, Don Juan López de Lazarraga, que vivió en el palacio "Quita-pechos" de Larrea, llamado así por las exenciones de que sus moradores disfrutaban, y el séptimo, Don Juan Ibáñez de Lazarraga que casó en Ordoñana y vivió en Oñate.

 

La sucesión de la Casa de  Lazarraga en Larrea

DON GÓMEZ PÉREZ DE LAZARRAGA, el heredero de la torre de Larrea, casó en Galarreta con Doña Mari López de Ocáriz, con la que vivió en Ameyugo, señorío de Doña Constanza de Ayala en servicio de esta señora; y en Ameyugo tuvieron dos hijos, María, que murió sin casar, y Juan, fraile Jerónimo en San Miguel de la Morcuera. Muerta Doña Mari López de Ocáriz, volvió a casar Don Gómez con Doña Milia García de Zuazo, hija de Juan García de Zuazo y Doña Teresa Sánchez de Herdoñana, vecinos de Salvatierra, con la que vivió en la torre de Larrea sirviendo a los señores de Oñate, ya Condes del mismo título, como alcalde mayor y gobernador de los estados de su casa. La torre de Larrea fue así punto neurálgico en la administración y gobierno de extensos territorios en Álava y Guipúzcoa, señoríos de los Guevaras.

Doña Constanza de Ayala, señora de Oñate y madre del primer Conde de este título, recordaba en su testamento y codicilo, fechado en 1472, la lealtad y los buenos servicios de Don Gómez Pérez de Lazarraga y de su esposa. Lo nombra cabezalero, y deja al matrimonio una cama y antecama completas, con ropas de la mejor calidad; a Doña Milia, un brial de Londres pardillo, una zamarra blanca, y un "Agnus Dei" de plata que le había hecho un platero de Belorado, y a Don Gómez, entre varias mandas, le devolvía una sortija de oro, nielada, que le había tomado prestada (5).

Entonces debían habitar ya Don Gómez y Doña Milia en Larrea, y en la torre de Larrea debieron nacer sus hijos DON PEDRO PÉREZ DE LAZARRAGA, sucesor en la torre de Larrea, tras de haber pleiteado largo tiempo con los frailes de la Morcuera, y Doña María Pérez de Lazarraga, que casó al palacio de Oreitia con Don Pedro Vélez de Guevara. Murió Don Gómez Pérez en 1480 dejando a su hijo "muy muchacho"; y en 1522 moría 'su esposa Doña Emilia enterrada, como su marido, en la sepultura de la torre de Larrea en la iglesia de San Millán del mismo lugar.

Siendo Don Gómez Pérez señor de la torre de Larrea, se retiró a ella su hermano menor Juan Ibáñez de Lazarraga, que vivía en Oñate en el palacio llamado "Jauregui", edificado por sus padres Don Pedro Pérez de Lazarraga y Doña Teresa Gómez de Berganzo, señores de la torre de Larrea. Estando en Oñate Don Juan Ibáñez "le sucedió matar a un clérigo", por cuya causa pasó a vivir a Álava a la torre de Larrea. En Álava tuvo un hijo de una moza de Aspuru, hijo que andando el tiempo sería contador de los Reyes Católicos: se llamó Juan Pérez de Lazarraga y era primo del conocido contador, secretario y hombre de confianza de los mismos Reyes Católicos, el citado Don Juan López de Lazarraga.

Al señor de la torre de Larrea Don Pedro Pérez de Lazarraga, hijo de Don Gómez y Doña Emilia, sucedió su hijo DON JUAN PÉREZ DE LAZARRAGA, que casado con Doña Ana González de Langarica, de la casa de Arrióla, no tuvo descendencia, por lo que le sucedió en la torre de Larrea su sobrino JUAN PÉREZ DE LAZARRAGA, hijo de su hermano llamado también Don Pedro Pérez de Lazarraga. Don Juan Pérez casó con Doña Catalina de Langarica, hija de Don Pedro González de Langarica y de Doña María Fernández de Vicuña, señores del palacio de Arrióla.

La rama alavesa de Lazarraga emparentaba así no sólo con conocidos personajes proyectados a la historia nacional, sino con las principales familias de la tierra. En los primeros años del siglo XVI se habían unido las casas de Guevara y Lazarraga por el matrimonio de Don Pedro Vélez de Guevara y Mora de Estella con Doña María Pérez de Lazarraga, "de la torre de Larrea". Don Pedro y Doña María fundaban el mayorazgo y capilla sepulcral de Oreitia el 29 de enero de 1523. Don Pedro Vélez de Guevara era a su vez biznieto de la rama no legítima de Don Beltrán de Guevara, señor de Guevara y Oñate, ricohombre de Enrique II, y de una dama de Oñate, Doña Inés de Lazarraga ponderada por su hermosura.

Por otra parte, la hija de los señores de la torre de Larrea Don Juan Pérez de Lazarraga y Doña Catalina González de Langarica, llamada Doña María Pérez de Lazarraga, casaba en 1599 con Don Juan de Velasco, señor del palacio de Galarreta (6); mientras, heredaba la torre de Larrea su hermano DON AGUSTÍN PÉREZ DE LAZARRAGA depositario de la relación genealógica escrita por su padre Juan Pérez de Lazarraga, el citado señor de la torre de Larrea. Esta relación, copiada por su yerno Don Juan de Velasco, me ha servido de fuente principal, junto con otras, en este estudio. Don Agustín Pérez de Lazarraga, señor de la torre de Larrea, casó en Maestu con Doña Luisa de Bujanda, hija del escribano Don Andrés Díaz de Bujanda (7)- En 1635 era señora de la torre de Larrea DOÑA MARIANA PÉREZ DE LAZARRAGA, vecina de Dallo, quien, en 18 de enero de aquel año, firmaba sus capitulaciones matrimoniales con Don Diego Pérez de Luzuriaga, con quien salió la torre de su apellido de origen (8).

Los libros sacramentales de la parroquia de Larrea nos transmiten numerosas noticias de las casas de Lazarraga y de sus señores, notables feligreses y hombres de letras (9).

En la relación de difuntos de 1572 se lee "Víspera de Na Sra. de Agosto fallesció el buen señor dn min López de Lazarraga, muy gran cristiano". Fue su sucesor Don Francisco López de Lazarraga. Este Don Martín López de Lazarraga, señor del palacio Quitapechos de Larrea era hijo del alcaide de la torre de Alegría Don Juan López de Lazarraga, nieto de Don Pedro Pérez de Lazarraga y Doña Teresa Gómez de Berganzo. Don Martín, casado con Doña Milia Pérez de Lazarraga, hija de los señores de la torre de Larrea, fundó en 1549 una capilla al lado del Evangelio en la iglesia parroquial de San Millán de Larrea. Se conserva, en efecto, en este templo parroquial, al lado del Evangelio, una capilla con bóveda nervada del siglo XVI; muestra terceletes y ligaduras formando círculo en torno a la clave central, lisa como las ocho menores que la circundan. Aunque no ostenta resto heráldico alguno, es muy presumible que sea la capilla fundada por Don Martín en 1549.

En 1573 figuran "el Sor Licenciado Lacarraga y la Sra su hermana Isabel". Esta Doña Isabel era hija de los anteriores y, muerto su padre, casó por poder en Larrea con Juan López de Lazarraga, de la casa de Jáuregui de Oñate; este Don Juan López de Lazarraga vivía en Madrid y era oficial mayor del Secretario Eraso. Doña Isabel enviudó pronto, volvió a Larrea y en Larrea murió en 1579.

Figuran también por estos años en los libros sacramentales Don Juan Pérez de Lazarraga, y su esposa Doña Catalina, señores de la torre de Larrea, y su hija y yerno, Doña María de Lazarraga y Don Juan de Velasco.

Yen 1600 aparece también el hijo de aquellos Don Agustín de Lazarraga, el heredero de la torre de Larrea; a la vez figuran los clérigos Pero López de Lazarraga y Martín López de Lazarraga, descendientes todos de la torre o del palacio "Quitapechos" o "Echenagusia" fundados por Don Pedro Pérez de Lazarraga y Doña Teresa Gómez de Berganzo en la primera mitad del «iglo XV.

 

NOTAS

(1) PÉREZ DE LAZARRAGA, JUAN, Traslado de la relación que dejó Juan Pérez de Lazarraga..., fol. 19. Publica esta relación COMAS, MARÍA, Juan López de Lazarraga, Secretario de los Reyes Católicos..., y la cita ampliamente LÓPEZ DE VICUÑA, GREGORIO, Antigüedad y Varones ilustres de la Casa de Vicuña en Álava, en "Hidalguía de Sangre”.

(2) PÉREZ DE LAZARRACA, JUAN, Traslado de la relación..., fol. 19.

(3) El padre de Doña Teresa murió en Aljubarrota según la citada relación, dato que no concuerda con la cronología de los Ayalas ni con la edad de Doña Teresa, que fecha el codicilo de su última voluntad en 1478, casi un «siglo después de Aljubarrota.

(4) PÉREZ DE LAZARRACA, JUAN, Traslado de la relación..., fol. 22.

(5) "Testamento de Doña Constanza de Ayala, señora de Oñate y Salinillas". 1472. R. A. de la Historia. Col. Salazar y Castro, D-10, fols. 272 v., 274 v. y 277.

(6) "Expediente de ingreso en la Orden de Santiago de Don Juan de Velasco y Lazarraga". Año 1614. A. H. N., núm. 8690.

(7) Como he dicho en otro lugar, debo la noticia de este documento al investigador Don José Luis de Vidaurrázaga, que prepara una extensa genealogía de la Casa de Lazarraga.

(8) LÓPEZ DE VICUÑA, GREGORIO, Hidalguía de sangre. Cádiz, 1927, págs. 326 y 327.

(9) "Primer Libro de Bautizados, Casados y Finado*". Parroquia de San Millán de Larrea.

 

Texto transcrito de la gran obra, en dos tomos, sobre las Casas Torre de Alava (de cuyo autor no recuerdo ahora nombre).

 

Antonio Castejón.

maruri2004@euskalnet.net

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